Publicidad subliminal en tus sueños

A diario nos vemos bombardeados por infinidad de avisos publicitarios que quieren capturar nuestra atención: paneles en la calle, avisos en Internet, radio, TV o prensa impresa; el único refugio seguro ha sido hasta ahora el momento de dormir.

Sin embargo, ¿qué sucedería si también pudiesen colocar publicidad en nuestros sueños?, esta pregunta se la planteó y respondió el equipo de STUDIO SMACK en el siguiente logrado video:

Apple y el product placement

El «product placement» es la cada vez más arraigada costumbre de insertar/incluir productos o sus marcas en una película o serie de televisión; lo fundamentalmente interesante es que la presencia de dichos productos no es necesaria para la narración de la película, por lo que su inserción sólo obedce a razones puramente comerciales.

Apple es la compañía reina en colocación de product placement en películas y series de televisión; su presupuesto para esta área debe ser enorme (aunque ellos niegan que paguen por el product placemente de sus equipos). Al ver una película o serie de televsión estadounidense uno puede llegar a creer que todas las personas en dicho país utlizan portátiles de Apple, iPhones y monitores de la marca.

Para combatir esta tendencia algo muy útil sería un tipo de gafas de realidad disminuida sobre las que escribí el otro día. Estas gafas permitirían bloquear del campo de visión los logotipos de las marcas y los productos asociados.

Gafas de realidad disminuida

Últimamente se habla mucho de las gafas de realidad aumentada, de sus posibilidades y todo eso; sin embargo, las que realmente hacen falta son las gafas de realidad disminuida. Me explico.

En el mundo de los navegadores web (Firefox, Internet Explorer, Opera, etc.) existen extensiones cuya principal función es la de eliminar la publicidad (y otras molestias visuales varias) en las páginas web que uno visita. El uso de estas extensiones es tan agradable y natural que es recién cuando uno tiene que utilizar un navegador web sin éstas instaladas se da con el desagradable choque de ver los sitios web inundados, por todas partes, con publicidad visualmente molesta.

Ahora cambiemos de escenario; al recorrer, en automóvil, una avenida principal de cualquier ciudad nos vemos bombardeados y agredidos visualmente por infinidad de paneles publicitarios que nos quieren vender algo o hacernos recordar una particular marca. Aquí es donde serían fabulosas unas gafas de realidad disminuida; su función sería la siguiente: borrar del campo de visión todos los logotipos de marcas y borrar todos los avisos identificados como publicitarios.

Siempre estaría la opción de definir una lista blanca, es decir, una lista con aquellas marcas o categorías de productos que uno sí quisiera ver o de las cuales estar enterado.

Además estas gafas serían útiles cuando uno ve televisión para eliminar aquellas marcas o productos cuya presencia en la serie o película que uno esté disfrutando sea debido al «product placement» (es decir, un producto que, en principio, no tiene por que estar ahí para la narración de la historia, pero que está presente porque se hizo un pago o arreglo para que así sea).

Finalizando, los posibles usos de dichas gafas de realidad disminuida son sumamente amplios.

Reciente patente de Google: Publicidad en tus conversaciones telefónicas

Esta patente es viable pues actualmente las personas no tienen problema en que se coloque publicidad en sus cuentas de correo electrónico. Sólo basta dar un paso más.

La ventaja es que las llamadas telefónicas serían gratis o muy baratas. Así que usuarios de Android, prepárense.

Aquí una sátira, creada por The Onion, sobre las divertidas consecuencias de este tipo de publicidad:

(se pueden activar los subtítulos en español del vídeo presionando en el ícono «CC»)

Fuente: Bitelia

El negocio de la televisión no es precisamente la venta de publicidad

TV y publicidad

Ante la pregunta ¿cuál es el negocio de la televisión?, la respuesta más socorrida e inmediata es: la venta de publicidad. Esto no es estrictamente preciso: el negocio de la televisión es la venta de la audiencia que ve los programas. Una cadena de televisión vende la atención de un determinado número de televidentes a un anunciante interesado en transmitir un mensaje a dicho grupo.

Es por ello la altísima importancia que tiene la medición de los índices de audiencia (ratings). Un programa con alto nivel de audiencia, por ejemplo un partido de un deporte popular y masivo, permite la venta de publicidad a un mayor precio pues dicha publicidad llegará a un mayor número de televidentes.

Algo similar ocurre con otros medios de comunicación: radio, periódicos, revistas, Internet, etc.